Análisis de Materiales Digitales

Internet como Espacio Educativo
-Gestión de la Información-

El éxito de todo proceso de aprendizaje radica en su detallada planeación y organización. A la hora de su planificación serán tan importantes las características del grupo de alumnos, los contenidos que se van a trabajar, los objetivos previstos, las actividades como así también los materiales que se utilizarán durante el desarrollo de este proceso.
Estos materiales han adquirido cada vez mayor importancia, pues vienen a cumplir un papel elemental en la educación, en tanto permiten el aprendizaje.
Al referirnos a materiales utilizados en las prácticas docente sería pertinente hacer una diferenciación entre material educativo y material didáctico, ya que frecuentemente se tiende a confundir estos términos.
Los materiales educativos son aquellos que, en diversos soportes, enseñan, informan, presentan y profundizan contenidos, esclarecen conceptos, brindan información, motivan los intereses y la curiosidad de los alumnos.
Por su parte, los materiales didácticos pueden considerarse como estrategias de aprendizaje, como instrumentos mediadores, auxiliares, facilitadores del proceso de enseñanza-aprendizaje. Además de viabilizar la adquisición y fijación de contenidos, motivan el aprendizaje significativo, permiten desarrollar habilidades cognitivas, el lenguaje oral y escrito, la capacidad de abstracción, como también la imaginación y la creatividad.
Es responsabilidad del docente, como mediador del proceso de aprendizaje, seleccionar, reunir y en ocasiones hasta diseñar y producir estos materiales. Por esto es válido recordar que todo material que se emplee en una práctica educativa debe guardar coherencia con los objetivos, las actividades, las características del grupo y sobre todo debe ser utilizado razonablemente.
Con la introducción de las nuevas tecnologías a los procesos educativos se abre la posibilidad de innovación, integrando nuevos recursos a la práctica docente. Pero esta innovación se dará efectivamente cuando estos recursos permitan superar los modelos tradicionales.
En la actualidad las herramientas telemáticas brindan otra forma de apropiación de conocimientos, posibilitan actividades de aprendizaje on-line como complementarias a los recursos tradicionales.
Debemos también prestar especial atención a los productos multimedia y a aquellas herramientas que permiten la creación de este tipo de material didáctico.
La multimedia es una tecnología que integra diversas formas de expresión. En ella el sonido, las imágenes fijas y animadas se unen al texto, complementándose y generando un nuevo lenguaje, el audiovisual. En algunos casos estas aplicaciones incorporan la posibilidad de interacción, convirtiendo al usuario en parte activa del manejo de la información dentro de una estructura hipermedial.
En educación estos productos constituyen, no solo otra alternativa para presentar contenidos sino, un recurso destinado al aprendizaje dentro de un contexto determinado.
Veamos ahora un ejemplo de este tipo de material:
Quien alguna vez ha tenido la oportunidad de acceder a la colección de recursos educativos y multimediales editados por el portal educativo argentino, educar, habrá podido apreciar el valioso material que se brinda a la comunidad educativa para acompañar su trabajo en el aula.
Ya sea que adquiera esta colección en forma totalmente gratuita o la acceda en línea desde el propio portal, este material no deja de atraer la atención del usuario. Una primera impresión nos muestra un trabajo estéticamente atractivo, basado en entornos gráficos especialmente creados para cada una de estas aplicaciones. Una exploración más detallada nos presenta contenidos muy interesantes y para no desaprovechar.
Se trata de una importante colección de recursos que ayudan al docente en el aprendizaje de estas nuevas tecnologías a la vez que orientan en la adaptación de las mismas al contexto educativo.
Para quien aún no ha tenido contacto con la colección puede acercarse a la misma ingresando al portal http://www.educ.ar/ o directamente a la página de inicio de la colección http://colección.educ.ar/. Con un simple clic descubrirá distintas estrategias que implican entornos diferentes para procesos de aprendizajes mediados por el uso de las nuevas tecnologías.
Para su análisis se ha seleccionado “Internet como espacio educativo. Gestión de la información”, el volumen Nº4 de la colección y que se interpreta como un material especialmente pensado para el docente, pues parte de su propio aprendizaje.
Reflexionando sobre la temática que aborda no podemos dejar de considerar este contenido como transversal a cualquier disciplina. ¿Quién alguna vez no se ha encontrado abrumado y desorientado ante el dilema de la exploración de información en Internet? ¡Cuántas veces hemos escuchado de parte de los propios alumnos experiencias de búsqueda frustradas en la web! Y otras tantas hemos leído informes impecablemente presentados y enriquecidos con imágenes que resultaron ser un mero “copy- paste” de información extractada fielmente de Internet y para nada procesada.
La desorientación frente a la abundancia y heterogeneidad de contenidos, en continuo crecimiento y ofrecidos desde las redes telemáticas como así también el consumo pasivo en los usuarios prevaleciendo sobre la posibilidad de crear, siguen siendo característicos de esta sociedad de la información y el conocimiento, aspectos importantes que seguramente pueden y deben ser trabajados desde la escuela.
En “Internet como espacio educativo. Gestión de la información” el docente encontrará una aproximación a las nuevas tecnologías como instrumentos educativos y las herramientas necesarias para aprender y enseñar a gestionar (buscar, seleccionar, procesar) información accedida desde Internet y a partir de allí generar nueva información.
Si analizamos la estructura de la aplicación, ésta parte de una HOME o página de inicio con un texto introductorio y explicativo sobre el contenido desarrollado. Aquí se presentan tres secciones posibles de navegación:

Sección 1 – “Marco Teórico”:

Esta sección se presenta dividida en cuatro módulos de “aprendizaje docente”, cada uno con una importante bibliografía relacionada con la didáctica y la tecnología, acompañada de expresiones de especialistas que le permitirán “conocer, profundizar y reflexionar” sobre esta temática y algunas propuestas específicas para ser aplicadas en el aula.
Así a lo largo de los cuatro módulos - “Sobre Internet”, “Internet en educación”, “Internet en procesos de enseñanza - aprendizaje” y “Saber hacer con Internet” – el docente podrá tener un acercamiento a conceptos básicos, recursos, herramientas de exploración y servicios que forman parte de Internet, lecturas específicas que le permitirán comprender como se relacionan las nuevas tecnologías y los modelos pedagógicos actuales, adquirir conocimiento y manejo de herramientas que le posibiliten evaluar ventajas y desventajas sobre el uso educativo de Internet, tanto en su rol como docentes, en las actividades con sus alumnos y en la articulación con otros espacios curriculares.
Algunos aspectos para destacar dentro de esta sección:

• Cada uno de los módulos mencionados cuenta con una serie de sugerencias de cómo realizar las lecturas y articularlas entre sí.
• Cada lectura contiene detalle de la fuente desde donde se la extractó y el tiempo aproximado de lectura que le implicará al usuario.

Sección 2 – “Actividades con Internet”:

En esta sección el usuario podrá acceder a una serie de actividades, WebQuest y proyectos, sugeridas para ser aplicadas con los alumnos. Estas actividades se hallan diferenciadas por ciclo, del primero al tercero de la Enseñanza General Básica, a los que se accede con un simple clic sobre cada una de las solapas diferenciadas por colores. También cuentan con un detalle de los contenidos trabajados y las áreas involucradas.
En el caso particular de las WebQuest, además de su tradicional organización (introducción, tarea, proceso, recursos, conclusión, evaluación) en cada una de ellas se suma una guía para el docente sobre cómo mediar cada proceso en particular.
Por otra parte cada proyecto se ha organizado con actividades y recursos destinados a su aplicación con los alumnos. Aquí también se proporcionan sugerencias para la mediación docente durante el desarrollo de cada proyecto.

Sección 3 – “Núcleos de Aprendizajes Prioritarios”:

Esta sección conduce a los “Núcleos de Aprendizajes Prioritarios”. Aquí un mapa de navegación a modo de índice vincula al usuario con distintos tramos de estos documentos.

Algo para destacar de esta sección:

• En este caso la navegación puede darse de manera interactiva, seleccionando el tópico de interés o bien, si el usuario lo desea, puede realizar una navegación secuencial o lineal.

Algo para observar:

• A diferencia de las otras secciones ésta no presenta una versión imprimible de los documentos.

Acompañan a estas tres secciones un banco de “Recursos” que pueden ser utilizados por el docente en sus propios proyectos o en actividades con los alumnos. Estos recursos se encuentran divididos en tres categorías, organizadas a modo de lista de referencias web, aquí cada URL cuenta con el vínculo correspondiente y una pequeña descripción de lo que encontrará el usuario al acceder a ese sitio.
Categorías:

• Programas - Descargas y Tutoriales: Desde aquí se puede acceder a sitios y páginas webs desde donde descargar a la PC programas y, en algunos casos, sus respectivos tutoriales.
  Destacaremos que algunos de estas aplicaciones se proporcionan con el CD.
• Directorios – Clasificados en sonidos, imágenes y fuentes: Tres listas de referencias web con acceso directo a este tipo de recursos.
• Banco de Imágenes – Más de setecientas imágenes fijas y animadas clasificadas y pertenecientes al propio portal de Educ.ar, listas para ser bajadas a la PC.

Destacaremos que este banco de recursos puede ser accedido desde cualquier parte de la aplicación, exceptuando de esta posibilidad a la sección de los NAP.

Desde una dimensión técnica podemos apuntar como datos a tener en cuenta por aquel usuario que pueda acceder a este volumen de la colección:

• El formato CD es autoejecutable, es decir se inicia automáticamente y viene con instrucciones para su uso y requerimientos de equipo y plataformas.
• Encontrará a este volumen 4 acompañado de los tres primeros de esta colección en un mismo disco.
• Tanto la versión On-line como el CD cuentan, al pie de la home y de cada página subordinada, bajo el título “Cómo usar el CD” sugerencias e instrucciones, tanto gráficas como textuales, de cómo realizar la navegación y la lectura del contenido.

En el aspecto estético, se han cuidado la selección y conjunción de gráficos simples para la iconicidad y fuentes sencillas y de fácil lectura para el soporte textual. La ausencia de otros medios que tradicionalmente actúan como sustento de la información presentada en formato texto, diferencian a ésta de otras aplicaciones de la colección educar. Tal vez esta característica tenga que ver con la idea de evitar la presencia de distractores innecesarios, por lo que podemos aseverar que en este caso en particular, los criterios instructivos y educativos prevalecen por sobre los estéticos.

La interacción del usuario se da por medio de una interfaz tanto gráfica como textual, pues los íconos se acompañan de etiquetas o textos aclarativos. Para quienes lo prefieran, cuentan con un mapa de navegación desde donde también se puede explorar el contenido. Estos son recursos válidos cuando se trata de usuarios que no están familiarizados con este tipo de iconicidad.

Si bien existe una facilidad de navegación y la interactividad permite al usuario moverse de una sección a otra sin perder el rumbo, esta intervención está solo limitada a la exploración de los contenidos dentro de la aplicación o de los recursos en línea, por lo tanto en un sentido unidireccional.

Como se mencionó al comienzo, este material ha sido delineado para un aprendizaje autónomo, pensando en el docente aprendiz de estas nuevas tecnologías, partiendo de la construcción de su propio conocimiento respecto a estos nuevos recursos. Tanto el marco teórico como los materiales complementarios cuentan con sugerencias para su mejor aprovechamiento y aplicación.

Las actividades propuestas para ser utilizadas con los alumnos sugieren un modelo pedagógico centrado en los procesos, donde priman la creatividad, la participación, el intercambio, la reflexión y el trabajo colaborativo. Se busca la construcción del conocimiento por descubrimiento, a partir de involucrarse, investigar, problematizar, preguntar. Sin dudas el modelo pedagógico que más se ajusta a la sociedad de la información y al uso eficaz de estas tecnologías.

Finalmente mencionaremos que la inclusión de este material redundará en beneficios del proceso enseñanza-aprendizaje, contribuirá con los nuevos modelos educativos y en la formación de alumnos y docentes como usuarios responsables de estas tecnologías.

A modo de conclusión, cabe volver a mencionar la importancia de utilizar adecuadamente estos nuevos materiales, según la validez que puedan tener en el proceso de aprendizaje y de las estrategias del docente diseñador de sus propias prácticas.

El blog como entorno de aprendizaje

Podemos observar a menudo como las plataformas virtuales y otras aplicaciones Web van conquistando de manera progresiva nuestro espacio educativo y como su número crece en forma exponencial.
Estas herramientas pueden tener un objetivo común, pero responden también a distintas necesidades y usos.
Si bien a la hora de incorporarlos plenamente a nuestras prácticas seguimos topándonos con algunas dificultades, generalmente relacionadas con las posibilidades de acceso a estos recursos desde nuestras instituciones lo cual muchas veces limita la exploración de todo su potencial educativo, afortunadamente, en lo que se refiere al manejo de herramientas destinadas a publicar contenidos en Internet, podemos encontrar sistemas con nuevas funcionalidades, más dinámicas, sencillas e interactivas que ponen al alcance de cualquier usuario sin necesidad de demasiados conocimientos llevar sus ideas a un contexto más publico.
Los blogs se han convertido en exponentes de estas propuestas y han puesto la publicación de contenidos en Internet al alcance de muchos.
Por su sencillez, su formato particular, su facilidad de manejo y sus posibilidades de interacción se convierten en recursos aptos para nuestro contexto educativo, desde donde podemos imaginarnos muchas posibilidades para su utilización.
Un blog nos permitirá crear nuevos entornos y situaciones de aprendizaje, desde donde estimular a los alumnos a la autonomía, a la creatividad y por desarrollarse en un contexto más público, al protagonismo y a la participación más que a la pasividad.
Un blog puede convertirse para el alumno en el cuaderno de clase, en un portfolio donde exponer sus propios trabajos, en un diario de ruta, todo en formato Web.
De tratarse de un blog grupal, de autoría compartida puede ser un elemento importante para iniciarlos en el trabajo colaborativo pues permite y requiere de la participación activa de todos los autores en forma permanente. Esto contribuirá a ir formando su identidad como autor, su compromiso y responsabilidad a la vez que favorecerá la construcción de nuevos conocimientos desde la interacción con otros, por ejemplos fomentando el debate por medio de los comentarios, sin descuidar establecer normas claras para tal fin.
Desde lo individual también los compromete a buscar, seleccionar, verificar, transformar la información recibida en nuevo conocimiento y a la vez CREAR y compartir nueva información con espíritu crítico y reflexivo. Esto promoverá poco a poco la voluntad, el deseo y hasta la necesidad de compartir conocimiento con otros, convirtiéndose de esta forma en ciudadanos del mundo.
Desde el rol docente también puede ser una excelente oportunidad para iniciarse en el uso de las herramientas Web y convertirse en participes de las nuevas tecnologías.
Los blogs pueden ayudar a intercambiar, a compartir experiencias e inquietudes con otros docentes o bien, como se expuso anteriormente, a fomentar redes de colaboración, en este caso entre profesionales.
Crear y administrar un blog individual o colectivo con otros docentes, ayudará no solo a conocer nuevas herramientas sino además a diseñar entornos de intercambio más actuales.
Un blog inmerso en una situación de aprendizaje puede ser la plataforma ideal para acercarse a los alumnos, más allá del ámbito del aula, ofreciéndoles nuevas actividades, materiales, orientación, tutoría. Pude ser generando como espacio de diálogo y reflexión entre docentes y alumnos. Esto implicará la elaboración de objetivos, criterios y modelos de evaluación acordes a la nueva situación de aprendizaje.
Pero seguramente la inclusión exitosa del blog como herramienta a la práctica docente requerirá tener en cuenta algunos aspectos:

• Si bien no es necesaria mucha instrucción, el docente deberá conocer los atributos de estas herramientas para poder orientar a sus alumnos en el uso de las mismas, por lo tanto debe experimentar, ensayar previamente con ellas.
• Tener la capacidad de detectar su utilidad o no según un aprendizaje específico.
• Promoverlo como una herramienta de aprendizaje más que con un fin en sí misma.
• Convertirlo en un elemento tan natural, común o habitual entre los estudiantes como lo pueden ser un libro de texto o un cuaderno de apuntes.

A modo de conclusión: Es apreciable el abanico de posibilidades que pueden ofrecer los Weblogs al contexto educativo. Lo importante es poder identificar su utilidad en una situación específica de aprendizaje y poner en práctica todo el potencial creador del que pueda disponer un docente.

Como las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación han modificado nuestro entorno social - Apreciación personal

Sin lugar a dudas durante los últimos años las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación han provocado importantísimos y profundos cambios en la manera en que los individuos nos comunicamos e interactuamos.
Diariamente somos testigos y partícipes del desarrollo acelerado de estas tecnologías. Desarrollos que han permitido unir lazos cada vez más fuertes entre las personas y el resto del mundo. Esta revolución tecnológica no solo ha ignorado las barreras del tiempo y del espacio, sino también ha modificado los escenarios tradicionales de toda acción humana. ¿Podemos asegurar, entonces, que el tiempo, las fronteras y las distancias entre las personas, han sido superados? En efecto, al entorno natural, físico y real al que pertenecemos y con el que nos relacionamos, se ha unido ahora otro tipo de entorno, el entorno virtual. Este nuevo escenario poblado de imágenes, íconos, figuras que provienen de diversas latitudes ha multiplicado y facilitado nuestras posibilidades de relación y comunicación con los demás, de acceso a nuevas y diversas fuentes de información, más allá de la comunidad y del entorno inmediato.
Este, apenas perceptible, dinamismo tecnológico que venimos transitando trae aparejada la necesidad de nuevos conocimientos y destrezas que permitan nuestro desenvolvimiento natural dentro de este nuevo espacio, donde convergen lo digital, lo virtual, lo electrónico, como componentes dominantes, que muchas veces superan nuestra capacidad de asimilación y acomodamiento.
El impacto generado por estas nuevas tecnologías ha sido tan importante y se ha dado con tanta celeridad que, prácticamente sin advertirlo, han invadido nuestras vidas hasta llegar a formar parte de nuestra cotidianeidad y tornarse indispensables en los diversos escenarios -sociales, laborales, educativos, domésticos, personales- en los que diariamente nos conducimos, a tal punto que resulta difícil pensar que podamos actuar prescindiendo de ellas.
Así han irrumpido en nuestras vidas primeramente la radio, el teléfono, la televisión en color, los soportes magnéticos para audio y video, el fax. Mas tarde los sistemas de digitalización, procesamiento, almacenamiento y transmisión de la información en cualquiera de sus formatos, las telecomunicaciones con las redes mundiales, como Internet y con ella la Web, el correo electrónico, los salones de chat, las bitácoras virtuales, los videologs, las wikis, los podcast, los Weblogs, los campus y aulas virtuales, las aplicaciones y soportes multimedias, la telefonía móvil con los mensajes de texto, los aparatos de TV en sus formatos más recientes, los video juegos, las video cámaras, el comercio y el dinero electrónico, entre otros.
Estas herramientas están por todas partes y han modificado nuestros ámbitos de experiencia diaria, donde las posibilidades de trabajar, estudiar, acceder a salud, comprar o vender, entretenerse son cada vez más accesibles.
Pero estas transformaciones no han sido solo materiales, no se han dado como eventos aislados, por el contrario, han sido acompañadas por cambios en el contexto cultural, educativo, económico y político. Es necesario destacar, entonces, que en esta redefinición social nuevos modelos de pensamiento, de comportamiento, de actitudes, de valores se han difundido a partir de la aparición de estas nuevas tecnologías, que se han convertido en motor de cambio de toda la estructura social. Así, por ejemplo, hasta hace algunos años atrás los ciudadanos sólo cumplíamos el papel de meros receptores de la información que recibíamos. En la actualidad participamos activamente como protagonistas, generadores o productores de esa información. A esta libertad de movimiento expresivo debemos sumarle, como rasgos distintivos de este nuevo entorno social, la globalización de la economía, la aparición de nuevos sectores laborales, la interactividad, la inmediatez de respuestas, la flexibilidad de tiempo y espacio, la omnipresencia de los medios de comunicación, la sobreabundancia de fuentes de información, la cada vez mayor tendencia a actuar en red, como es el caso de las organizaciones y empresas, en las que el capitalismo informacional y el conocimiento constituyen el nuevo activo para sus actividades, porque en este nuevo entramado social la información es sinónimo de poder. Podemos hablar así de sociedad de la información, del conocimiento, de la comunicación, del aprendizaje según la designación dada por distintos autores o pensadores contemporáneos que se han encomendado la tarea de interpretar como estas nuevas tecnologías han repercutido socialmente.
Culturalmente podemos encontrar que los referentes más importantes de las Nuevas Tecnologías de Información y Comunicación como Internet, el teléfono celular y usos derivados de éstos, como el chat y los mensajes de texto, han provocado un cambio sustantivo en el lenguaje, tanto escrito como oral. En este nuevo lenguaje, destacan el uso de palabras donde las vocales no existen, de abreviaciones, siglas, “emoticones” y expresiones propias de este nuevo entorno, que han superado el contexto particular del ciberespacio y han pasado a popularizarse en la vida diaria. Daría la impresión que todo lo que sucede en el ciberespacio parece haber conseguido su lugar fuera de él, en especial el lenguaje.
Por su parte, el campo educativo no ha quedado ajeno a de estas transformaciones del mundo y la sociedad actual. Las demandas que actualmente se plantean requieren que la educación deba adecuarse a los nuevos escenarios, mucho más competitivos y exigentes. Hoy la preparación necesaria para poder participar activamente de una sociedad, para acceder al primer empleo o para continuar con los estudios superiores, precisa de otros saberes y capacidades, exigencias cada vez mayores. La educación ya no puede limitarse solo a los recursos tradicionales, hoy el uso habitual de las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación y el adquirir las habilidades para su manejo son necesarios, podría decirse casi imprescindibles. No es difícil encontrar, cada vez más, espacios “simbólicos o virtuales” que brindan conocimientos a varios sectores sociales valiéndose de estas tecnologías.
Quienes tenemos el compromiso de preparar para el futuro no debemos estar ajenos a estas nuevas premisas y tener en cuenta que estas nuevas tecnologías estarán cada vez más presentes. Para quienes transitamos estas estructuras sociales y para quienes lo harán en el futuro como ciudadanos activos, se hace imprescindible conocer, utilizar y valorar las posibilidades que estas tecnologías ofrecen, como recursos para mejorar los propios aprendizajes, desarrollar estrategias y potenciar distintas habilidades que se conviertan en medios sociabilizadores. El desconocimiento en su manejo y aplicación excluye, poco a poco, de una sociedad, aunque cueste aceptarlo, cada vez más tecnológicamente organizada.
No puedo cerrar estas apreciaciones sin antes hacer referencia a lo que considero una de las características distintivas de este fenómeno originado por el surgimiento de las nuevas tecnologías y al que algunos han dado en llamar Sociedad de la Información y el conocimiento, la desigualdad. Mientras algunas naciones o sectores sociales tienen mayores posibilidades de acceso a este tipo de tecnologías entre sus ciudadanos, en otros sectores más marginados esta posibilidad sigue siendo aún lejana. Esta desigualdad de posibilidades ha venido a unirse a las ya existentes en cuanto a políticas económicas y sociales se refiere, si bien es cierto que en los últimos años hemos observado cierta preocupación por parte de algunos estados en acortar esta “brecha” entre ciudadanos y tecnologías.
Particularmente considero que la construcción de una Sociedad de la Información que integre e involucre de manera equitativa a todos los sectores sociales requiere no solo del compromiso de los estados sino además de la sociedad civil en general, solo así podremos considerarnos como ciudadanos verdaderamente protagonistas de esta sociedad en permanente construcción.